"En el seno de la Plataforma de Toledo en Defensa del Tajo, hemos hecho varios análisis sobre esta cuestión. Muchos de ellos los hemos expuesto a la prensa, ya sea según demanda o al hilo de otras intervenciones.
Asumimos, en principio, que las pruebas recogidas por la Confederación así como su cadena de custodia y el resultado de sus análisis son rigurosas.
Sin embargo, el informe sobre el que se basa la propuesta sancionadora de la CHT al Ayuntamiento de Toledo no es en absoluto riguroso sino intencionadamente tendencioso. No voy a entrar en su análisis detallado pero baste decir que:
- Los episodios de espumas se dan todos los días porque el río está absolutamente saturado de inmundicias de todo tipo. No es necesario que aparezca toda la superficie cubierta de espumas de casi un metro para que se constate la afirmación anterior.
- Sin pretender quitar responsabilidad al Ayuntamiento de Toledo o a cualquier otro sobre sus vertidos, el grueso de la contaminación que lleva el Tajo en Toledo procede del Jarama, cuyas aguas son casi en su totalidad aguas procedentes de vertidos más o menos depurados y cuya cantidad es al menos 85 veces superior a los vertidos de Toledo.
- En esas condiciones, basta cualquier pequeño agravio añadido para que se desencadenen procesos de grandes espumas o mortandad masiva de peces, por citar alguno. Pero eso no constituye razón para señalar a la última gota a partir de la cual se derrama el vaso como culpable de tal derrame. Es lo que ha hecho la CHT, poner el foco en los dos últimos puntos de vertido previos a de la gran eclosión de espumas.
- Esas espumas no se hubieran producido si no fuera por la presencia de azudes y otros elementos que agitan el agua. De hecho, las espumas de Safont no se forman en la presa sino a la salida de las turbinas, por las que no pasa el agua procedente del arroyo Aserradero, hecho éste que el informe obvia.
- La formación de espumas es un proceso acumulativo que se hace visible bajo determinadas condiciones en las que la agitación del agua es determinante. Con o sin formación de espumas, la contaminación y su origen cualitativo se hace patente olfativamente. Éste es también un rasgo habitual y continuo que caracteriza a las aguas que circulan por el cauce del Tajo en Toledo, su olor a detergente denota la enorme presencia de fosfatos y otras sustancias de procedencia orgánica de descomposición.
- Episodios de espumas más o menos densas se han seguido denunciando desde mediados de octubre en distintos puntos de la cuenca del Tajo, ya sea en el curso del Guadarrama, del Manzanares, del Jarama o del Henares, por citar sólo algunos.
- A pesar de lo anterior, en ningún otro punto se han tomado muestras ni se ha considerado la formación de espumas que los agentes medioambientales de CLM constataron y documentaron el mismo día 15 de octubre aguas arriba del punto de vertido de la depuradora del Polígono Industrial de Toledo.
Por no extenderme más sólo recordairé que las primeras declaraciones hechas por el SEPRONA y la CHT empezaron restando importancia al asunto y dándole un aire de normalidad aduciendo que la formación de espumas se debía a la escorrentía de las últimas lluvias después de un periodo muy seco y largo y a la bajada de las temperaturas; hasta que al Delegado de Gobierno se le ocurrió que este asunto había que rentabilizarlo políticamente, Esto me recuerda la normalidad con que también quisieron hacernos pasar la mortandad de peces de junio de 2012, alegando que se trataba de un proceso de muerte natural por falta de oxígeno disuelto en el agua, argumento sobre el que se apoyó la fiscalia para darle carpetazo y abrir de nuevo el teatrillo del "y tú más" con el que la ciudadanía contribuimos prestando ojos y oídos en lugar de sentido común y crítico de la medida y proporción".
Saludos.
Alejandro Cano
Plataforma de Toledo en Defensa del Tajo
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