16 de mayo de 2017

MEDIO AMBIENTE: Reflexiones recogidas del Facebook Guadalajara España sobre el trasvase Tajo-Segura

"Por estos grandes tubos se desvía más agua de la que se dejará correr por el cauce natural del río..."
(Foto: atletismo toledano)

Reproducimos unas reflexiones tomadas del Facebook de Guadalajara España:

"Desde muy antiguo se construyeron acueductos en la península Ibérica, el agua había que llevarla por su propio peso de un lugar a otro para poder beber. Fueron los romanos los que nos dejaron grandiosos ejemplos de esa arquitectura civil en España.

Siglos después, los ingenieros quisieron trasladar agua de la España húmeda, a la España seca, por una serie de acueductos por los cuales se trasvasaría de las cuencas más lluviosas a las cuencas más secas. Hasta aquí y en la teoría todo era positivo, pero se comenzó no por trasladar agua de la España húmeda, sino de una región también con clima seco y aun peor, se recogerían las aguas del inicio de la cuenca del Tajo.

Después de años de trasvase, el río Tajo se ha extinguido en su cauce medio, ha desaparecido la vida de sus riberas, dejando paso a un inmundo arroyo fruto de los vertidos de las grandes ciudades.

Por estos grandes tubos se desvía más agua de la que se dejará correr por el cauce natural del río, a esto lo llaman “excedentes” una ecuación donde las variables que entran en juego son la codicia, avaricia, especulación y la sobre explotación de una cuenca. Para todo esto se construyó dos grandes presas el lecho de la Alcarria, que albergarían los Mares de Castilla, un espejismo que solamente duró una década, hasta que comenzaron estos grandes tubos a tragar agua del Tajo.

Mientras tanto, el Levante comenzó a reclamar más y más recursos de la cuenca cedente, con el pretexto que esta agua, estaba creando las mejores exportaciones de la huerta a toda Europa y un turismo de alto standing…

Pero se olvidaron de nuestras gentes, de nuestro río, de la riqueza que desapareció entre el acero y el hormigón. Detrás de estas montañas, miles de personas tuvieron que emigrar, dejaron sus tierras anegadas por unas aguas que no podrían utilizar jamás. Cambiaron su modo de vida, incluso muchos pueblos, quedaron aislado durante 50 años tras la construcción de las presas. Nadie se acuerda de ellos, incluso después de haberlo dado todo, se les tacha de insolidarios.

Nada será igual tras la construcción de esta faraónica obra, maldigo a los que con el pretexto de beber, desviaron el gran río a morir sobre tanta avaricia".

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