17 de octubre de 2015
MEDIO AMBIENTE: El coste del trasvase Tajo-Segura que siguen pagando los ciudadanos, según el diario.es de CLM
Las arcas públicas pagan hasta un 40% de la amortización de
las obras, mientras que los impactos medioambientales “no están siendo
compensados”.
Nuria Hernández y Enrique San Martín, de la Fundación Nueva
Cultura del Agua, analizan los costes y alternativas al trasvase.
“La justificación del trasvase no es el abastecimiento, sino
que se utiliza eso como excusa para hacerlo más defendible socialmente”.
Cuando en los años 30 comenzó a proyectarse la obra del
trasvase Tajo-Segura, el objetivo del mismo fue propiciar la producción
agrícola de las zonas más rentables de Levante. Es decir, esa derivación de
agua estaba enfocada básicamente al regadío. Es una situación que ya había
cambiado cuando comenzó su explotación 50 años después, en 1980, y que hoy en
día prácticamente carece de sentido. Ahora priman los criterios de
abastecimiento, equidad y desarrollo sostenible, unos principios que para
investigadores de la Fundación Nueva Cultura del Agua (FNCA) no se cumplen y a
los que además se une la “cuestionable” rentabilidad económica del trasvase en
cuanto a coste-beneficio. Es en esta última cuestión donde surgen las mayores
dudas.
El Tajo-Segura tiene unos costes fijos de su construcción
que aún se siguen amortizando (con horizonte hasta 2030) y aparte otros
variables derivados de su explotación con el que corren los regantes de
Levante, principales beneficiarios del mismo. La profesora Nuria Hernández-Mora
explica que cuando el trasvase comenzó a funcionar, la transferencia de 1.000
hectómetros cúbicos anuales se concibió en dos fases: una primera de 600
hectómetros y otra de 400 hectómetros que nunca llegó a realizarse porque se
“sobreestimaron los recursos”. “Ya desde el principio, solo se ha estado
recuperando el 60% de los costes porque se entendió que el otro 40% los
usuarios no tenían que pagarlo por no haberlo trasvasado”. Ese porcentaje es el
que han asumido las arcas públicas, es decir, los ciudadanos, por las obras del
trasvase.
En La Tribuna de Toledo el Concejal de Deportes del Ayto. de Toledo: «Lo ideal es que sólo haya atletismo en esta pista, pero...."
El concejal de Deportes del Ayuntamiento asegura que la
pista de la Escuela de Gimnasia debe compartirse y que si el atletismo y el
rugby no quieren, se establecerán horarios.
La masificación en la pista de la Escuela de Gimnasia de
Toledo no tiene solución posible. Es lo que se desprende de las declaraciones
del concejal de Deportes del Ayuntamiento de la capital, un Juan José Pérez del
Pino tajante con esta situación, pues apuesta porque se comparta como hasta
ahora porque «los niños tienen que jugar y no se van a ir de Toledo». Desde su
punto de vista, la postura de la Plataforma que se ha creado para denunciar el
mal uso de la instalación no ha tomado el camino correcto y, por eso, va a
intentar reunirse con este colectivo para exponer su opinión y las razones que
han llevado a tal distribución. Aunque está sin confirmar, el encuentro podría
producirse el próximo lunes.
De todos modos, Pérez del Pino repite que «en vez de utilizar
a los medios de comunicación para presionar, podrían haber venido a hablar
conmigo y si la solución no les gusta, que luego lo hubieran publicado».
Tampoco entiende el edil que sea ahora cuando se proteste y no «cuando en otras
épocas, en legislaturas tanto del PSOE como del PP, se han perdido campos de
fútbol en la ciudad».
Asimismo, explica que se ha trasladado a los niños de las
escuelas de fútbol al campo de la pista por el mal estado del que se instaló
para el hockey porque existen riesgos para su integridad física y que se ha
hecho por consejo de los técnicos del Patronato Deportivo Municipal, así que
«si quieren que no sea así tendrán que poner ellos razones técnicas», dice.
Asimismo, recuerda Del Pino que la Liga Municipal de fútbol 7 ya se ha tenido
que marchar a otras poblaciones limítrofes y que «con los niños no va a
suceder».
Lo que sí reconoce el concejal del área deportiva es que «lo
ideal es que sólo haya atletismo en esta pista, pero con las instalaciones que
tenemos, no hay otro remedio que compartirlas por todos» e insiste en que
muchos usuarios la están utilizando sin pagar y sin pedirlo previamente, así
que «si no quieren, tendremos que establecer unos horarios». En cualquier caso,
al edil le extraña el revuelo que se ha formado cuando «sólo coinciden unas
dos o tres horas a la semana».
Por tanto, si al final se produce la reunión entre ambas
partes, la solución que se expone desde el consistorio es clara, en ningún caso
se va a modificar el reparto de actividades deportivas en la pista de la
Escuela de Gimnasia y si persisten las quejas de los principales clubes de
atletismo de la ciudad, se marcarán unos horarios para facilitar que todos
puedan entrenarse y realizar su deporte sin ningún tupo de impedimento.
- FUENTE: J. MARIO LOECHES EN LA TRIBUNA DE TOLEDO
Suscribirse a:
Entradas (Atom)