Lucas Búa apuesta por ir a por todas en un año en el que
sueña con volver a rebajar su marca personal
«No tengo miedo a nadie». Son las palabras de Lucas Búa,
actual campeón de España absoluto de los 400 metros lisos, de cara a los
objetivos que se marca para el presente ejercicio. El atleta toledano del FC
Barcelona resume así la vocación con la que irá a las próximas competiciones,
sin ir más lejos la Copa del Rey, y que no será otra que la de luchar por la
victoria en cada carrera. Si se puede, además, aspira a mejorar su marca,
aunque entiende que será difícil llegar a registros como la mínima olímpica,
fijada en 45.40 y todavía alejada de su mejor tiempo de presentación en los 400
metros lisos, de 45.98.
Para abrir boca, el capitalino ya ha firmado un registro de
47.45 en un control federativo en Antequera, un tiempo notable porque supone
«empezar la temporada casi igualando mi marca personal en pista cubierta, que
está en 47.25». Búa admite, no obstante, que «estaba bien y sabía que me iba a
mover en torno a eso».
Después de esta prueba, que se llevó a cabo a finales de
diciembre, el capitalino acudió a la concentración en Valencia con el resto del
equipo español de 400 metros. El objetivo fue «preparar los cambios para los
relevos y entrenarlo de cara al Europeo, aunque también nos sirvió para ir
haciendo grupo y convivencia».